Estas son unas palabras que le escribí a mi nueva ahijada presentada el sabado 01 de marzo, en realidad es una dedicación a ella y su madre, mi amiga:
Querida Ahijada:
Cuando te ví por primera vez, no eras más que una pequeña porción de tus padres, llegue a tí por casualidad, por un acierto del destino.
Con el pasar del tiempo fuí interactuando con tu entorno, me acerque a la mujer que te dío la vida, la persona mas integra y humana que me ha tocado ver hasta el momento… y a la hoy, tengo el privilegio de llamar amiga.
No recuerdo cuando y ni como fue que comenzaste a conquistar mi corazón, pienso que en la medida en que creciste, te sentí más cercana. Te empecé a conocer, paso el tiempo y tu familia empezó a acogerme en su hogar.
Me toco acompañarte en momentos duros, que tal vez para tí pasaron por alto, sin embargo yo estuve ahí, sosteniendo tu mano y apoyando a tu madre. Sin darme cuenta ambas pasaron a ser parte de mis preocupaciones, simplemente porque ambas lograron llenar un vació que no conocía en mí. El de una hermana.
En algún momento me pidieron ser tu madrina, pensé que era un honor y una enorme responsabilidad, acepte gustosa. Sin embargo no fue sino hasta unos instantes atrás que me doy cuenta la trascendencia de esta solicitud.
Ser tu madrina no es sólo un título, es un estar contigo por siempre. Es hacerte participe de mi vida; es un lazo.. No es sólo una responsabilidad, es un bienestar indescriptible, tengo a alguien que estará unida a mí. Tengo una ahijada.
Y quiero que sepas, que a pesar de lo extravagante e informal que te puede parecer tu madrina, es una mujer que te ama y que sabe lo importante que será para ti desde ahora en adelante, por lo mismo te pido que tengas absoluta confianza en mí Se que eres pequeña y lo más probable es que no entiendas lo que te escribo, pero créeme, algún día sabrás de que estoy hablando.
Un besito princesa, nos vemos pronto.
Tu amiga-madrina
Cuando te ví por primera vez, no eras más que una pequeña porción de tus padres, llegue a tí por casualidad, por un acierto del destino.
Con el pasar del tiempo fuí interactuando con tu entorno, me acerque a la mujer que te dío la vida, la persona mas integra y humana que me ha tocado ver hasta el momento… y a la hoy, tengo el privilegio de llamar amiga.
No recuerdo cuando y ni como fue que comenzaste a conquistar mi corazón, pienso que en la medida en que creciste, te sentí más cercana. Te empecé a conocer, paso el tiempo y tu familia empezó a acogerme en su hogar.
Me toco acompañarte en momentos duros, que tal vez para tí pasaron por alto, sin embargo yo estuve ahí, sosteniendo tu mano y apoyando a tu madre. Sin darme cuenta ambas pasaron a ser parte de mis preocupaciones, simplemente porque ambas lograron llenar un vació que no conocía en mí. El de una hermana.
En algún momento me pidieron ser tu madrina, pensé que era un honor y una enorme responsabilidad, acepte gustosa. Sin embargo no fue sino hasta unos instantes atrás que me doy cuenta la trascendencia de esta solicitud.
Ser tu madrina no es sólo un título, es un estar contigo por siempre. Es hacerte participe de mi vida; es un lazo.. No es sólo una responsabilidad, es un bienestar indescriptible, tengo a alguien que estará unida a mí. Tengo una ahijada.
Y quiero que sepas, que a pesar de lo extravagante e informal que te puede parecer tu madrina, es una mujer que te ama y que sabe lo importante que será para ti desde ahora en adelante, por lo mismo te pido que tengas absoluta confianza en mí Se que eres pequeña y lo más probable es que no entiendas lo que te escribo, pero créeme, algún día sabrás de que estoy hablando.
Un besito princesa, nos vemos pronto.
Tu amiga-madrina
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